Cualquier operador de montacargas le dirá que una de las cosas más terribles que pueden suceder es que el sistema hidráulico de las horquillas falle. Tal falla puede causar daño a los individuos en el área de trabajo. La carga puede caer sobre ellos o la metralla de la carga puede golpearlos. Ser capaz de solucionar adecuadamente los problemas hidráulicos de su horquilla antes de su turno ayudará a garantizar su seguridad y la de sus compañeros de trabajo.
Limpie las varillas que forman parte del cilindro. Levanta los tenedores. Vea si hay una capa de aceite en el vástago del pistón del cilindro. Si hay más de una capa delgada o rayas, puede haber un problema con los sellos dentro de la varilla. Esto requerirá un profesional capacitado para hacer la reparación.
$config[code] not foundCompruebe el nivel de fluido hidráulico. Asegúrese de que esté lleno. Hay dos métodos potenciales para medir el nivel de líquido. Una es visual: ver una línea en el plástico semitransparente. La otra es la varilla tradicional que se extrae y examina. Tendrá una línea de relleno en él. Si no está lleno, permitirá que entre aire en el cilindro. Esto puede causar daños a los sellos y eructos de las horquillas. El eructo hará que las horquillas se muevan con movimientos bruscos.
Examina el movimiento de las horquillas. Si son bruscos y, sin embargo, los niveles hidráulicos son normales, puede haber un problema con la bomba de fluido hidráulico. La bomba puede estar obstruida o puede haber salido por completo. Esto tendrá que ser examinado por un técnico capacitado profesionalmente.
Examine todas las líneas que entran y salen de los cilindros. Límpialos con un paño. Mueva las horquillas unas cuantas veces y vea si las mangueras tienen fugas en las conexiones o si tienen fugas en algún lugar de la línea. Estos deberán ser reparados o reemplazados por un técnico capacitado.