Cómo administrar la disciplina de los empleados

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Anonim

Idealmente, la gerencia necesitaría simplemente supervisar a los trabajadores productivos, interviniendo de manera mínima, y ​​por lo general de manera positiva, para mantener al grupo en la dirección correcta. En realidad, sin embargo, intervenir con disciplina es a menudo una parte necesaria del proceso de gestión de los empleados. Si se encuentra en la infeliz posición de tener que disciplinar a un empleado, la forma en que conduce su disciplina es importante. Al seguir un proceso claro, puede asegurarse de que sus esfuerzos de disciplina sean efectivos y produzcan resultados positivos.

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Comunicar las expectativas regularmente

Antes de disciplinar a los empleados, asegúrese de que sus expectativas sean claras. Si observa que uno o más empleados no cumplen con las expectativas, aumente la frecuencia y claridad de sus comunicaciones relacionadas con las expectativas. Use notas, revisiones de desempeño y conversaciones diarias como herramientas para comunicar estas necesidades, sugiere Barbara Richman para el "Memphis Business Journal".

Explora tus limitaciones

Antes de decidir y dispensar disciplina, verifique sus derechos disciplinarios. Revise la sección de disciplina del manual del empleado, si existe tal documento, para actualizarse sobre las reglas de disciplina. Si aún no está seguro de sus opciones, hable con su supervisor para determinar qué es y qué no puede hacer en términos de disciplina. Esto evita los problemas que pueden surgir si el empleado disciplinado busca ayuda para una autoridad superior. Si está disciplinando a un empleado protegido por un sindicato o por contrato, asegúrese de que su disciplina no viole las reglas estipuladas en los acuerdos sindicales o los contratos individuales del empleado.

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Seleccione su tipo de disciplina

Decida específicamente qué quiere hacer para disciplinar a este empleado y planifique completamente su plan de disciplina antes de hablar con su empleado. Si esta es la primera vez que habla con el empleado, considere una advertencia verbal o escrita. Si ha abordado este tema anteriormente, intente algo más serio, como una suspensión. Si elige suspender al empleado, determine los detalles, incluso si será pagado o no, y cuánto durará, antes de reunirse con el empleado.

Disciplina rápidamente

La disciplina debe ser oportuna para ser efectiva. Si descubre que un empleado ha hecho algo que requiere una acción disciplinaria, no espere. Actúe rápidamente para que el empleado pueda ver que la disciplina está directamente relacionada con la falta. Cuanto más tiempo permita pasar antes de impartir la disciplina, más difícil será para el empleado ver la conexión entre la acción y la consecuencia.

Presente documentacion

Aunque es posible que no se le solicite que demuestre la mala conducta de un empleado, proporcionar alguna documentación para reforzar su reclamo puede aumentar la disposición del empleado a aceptar la consecuencia. Reúna cualquier evidencia que se relacione con la ofensa por la cual los empleados están siendo castigados, incluyendo: revisiones de desempeño, registros de ventas o financieros o secuencias de video. Cuando usted sanciona al empleado, preséntele su documentación. Esto puede inducirlo a tomar posesión del problema e inducirlo a trabajar para la superación personal.

Requerir el reconocimiento del empleado

Documentar esta disciplina es vital, especialmente si está tratando con un empleado que está bajo la protección de un sindicato o contrato. Después de presentar la disciplina, pídale al empleado que firme una notificación por escrito de que se dispensó la disciplina. Si el empleado se niega a firmar, documente este rechazo, recomienda Richman.

Seguir

La disciplina es un proceso. No has terminado después de imponer tu sanción. Haga un seguimiento con su empleado en las semanas y meses que siguen a la disciplina, monitoreando específicamente el comportamiento problemático por el cual el empleado fue disciplinado. Si el empleado no ha cambiado su forma de ser, repita el proceso, esta vez otorgando una sanción más severa.