Las habilidades organizativas ayudan a mantener nuestras vidas y aulas optimizadas y libres de desorden. Aunque aprender las habilidades de organización puede llevar tiempo, hay muchos juegos para jugar en el aula que pueden ayudar a que sus alumnos aprendan las habilidades de organización adecuadas.
Clasificación de los ojos vendados
Como la forma de los objetos a menudo determina cómo se organizan las cosas, este juego ayuda a los estudiantes a comprender la importancia de las dimensiones espaciales en la organización. Siente a los estudiantes con los ojos vendados en una silla frente a una mesa. Coloque al menos cuatro cajas de madera con formas recortadas en la parte superior frente a cada estudiante. Cada estudiante recibe una bolsa de bloques de madera de formas diferentes. Cuando comience el juego, los estudiantes agarrarán una caja y usarán sus dedos para sentir la forma en la parte superior de la caja. A medida que colocan los bloques en los cuadros apropiados, los estudiantes organizarán los cuadros por forma para facilitar la clasificación. El juego continúa hasta que un jugador coloca todos los bloques en sus casillas.
$config[code] not foundOrganización de la memoria
Otro aspecto importante de la organización es la memoria. Emplee un juego de memoria simple con los estudiantes dándole a cada estudiante 50 tarjetas con una palabra en cada tarjeta. Debe haber cinco grupos de 10 palabras en una categoría particular. Por ejemplo, un grupo de palabras podría ser sobre animales y otro sobre vehículos. Coloca las cartas boca abajo sobre la mesa. Los estudiantes deben tener cajas de cartón pequeñas con un nombre de categoría escrito en el frente de la caja. Luego, los estudiantes recogen la tarjeta y la colocan en el cuadro de la categoría correcta lo más rápido posible. Cuando el primer estudiante termine, marque todas las casillas para una organización precisa. El estudiante que haya anotado más puntos gana.
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Traído a ti por Sapling Traído a ti por SaplingDirector y Constructor
Para este juego, divide el aula en grupos de cuatro. Un estudiante (el director) en cada grupo toma 10 bloques de construcción y una base de construcción. Otro estudiante (el constructor) toma otros 10 bloques. Los dos estudiantes restantes son repartidores. En una habitación separada, el director crea un objeto a partir de los bloques de construcción, escribiendo las instrucciones para la construcción en tarjetas de índice. El repartidor lleva estas fichas al segundo repartidor, barajando las cartas mientras camina. El segundo repartidor toma estas instrucciones hacia el constructor, nuevamente barajando las cartas. Después de recibir las tarjetas de índice, el constructor intenta organizar las instrucciones correctamente y construir una copia de la estructura del director. El ganador se decide por qué edificios del equipo coinciden entre sí.