Si trabaja con alguien que constantemente sobrepasa su rol y manda a otros empleados, incluido su propio supervisor, sus acciones pueden erosionar la moral de los empleados y dificultar el desempeño laboral. Si desea frenar su comportamiento, debe establecer límites firmes y dejar claro que no le permitirá tiranizar la oficina.
Entender su perspectiva
Ponerse en el lugar de su compañero de trabajo puede ayudarlo a comprender su motivación y determinar la mejor manera de poner fin a sus formas dominantes. Esté atento a los patrones en su comportamiento. ¿Es siempre mandón o actúa principalmente cuando está bajo estrés? Puede darse cuenta de que es inseguro porque es la persona más joven de la empresa o el empleado más nuevo y siente la necesidad de demostrar su valía. O puede descubrir que es peor cuando tuvo una mala reunión con un cliente o cuando perdió un proyecto o una asignación a otro empleado.
$config[code] not foundReúne fuerza en números
Si tu colega domina todo el lugar de trabajo, unirte puede quitarle su poder. Hable con sus compañeros de trabajo sobre la situación y su efecto negativo en el equipo. Anímelos a defenderse cuando él comience a ordenarlos y dígales que hará lo mismo. Si incluso unas pocas personas se niegan a dejar que el mandatario principal tome el control, otros lo seguirán pronto. También es importante acercarse a su jefe. Si ella le permite darle órdenes, esto le indica a otros empleados que tiene más poder que ella. Describa cómo este comportamiento lastima al equipo y pídale que lo represente en nombre del personal.
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Traído a ti por Sapling Traído a ti por SaplingPon límites
Si discutes con tu colega o justificas tu propio comportamiento, sugieres a él y a otros que tiene autoridad sobre ti. Cuando él intente darle órdenes, mantenga su respuesta breve y simple. Por ejemplo, dígale "No puedo encargarme de este proyecto porque tengo mi propio trabajo". O bien, diga "Tengo todo bajo control y no necesito ayuda". Inmediatamente, regrese A su trabajo y diplomáticamente se niegan a contratarlo.
Enfréntalo como último recurso
Los casos extremos pueden requerir un enfoque directo. Hable en privado con él y explíquele que su comportamiento lo pone en una posición difícil porque fue contratado para informarle al jefe, no a él. Explique cómo su autoridad interfiere con su productividad y perjudica su credibilidad ante los ojos de clientes y colegas. Dígale que es capaz de administrar su trabajo y su tiempo para usted y pídale que se centre en su propio trabajo en lugar de hacer que el suyo sea más difícil.